Yo decido qué me gusta y qué deseo

Aquí estoy con las colegas sentadas en un banco, aburridas… muy aburridas. Si tuviese que decir algo de este día, la banda sonora sería «Miro la vida pasar» de Fangoria.

De repente alguien dice «peazo tío…» y todas miramos para donde mira nuestra amiga y asentimos con la cabeza mientras emitimos un «ya te digo… si, si… que tío más bueno…». Después de la primera afirmación me quedo pensando. ¿Por qué? ¿Por qué una cuadrilla de diez personas, siendo tan diferentes entre nosotras y teniendo unos gustos tan diferentes, estamos todas tan de acuerdo en que ese tío está bueno? ¿Y en serio nos parece que está bueno o de alguna manera estamos obligadas a decir que está bueno? ¿Es casualidad? No, no lo creo.

Creo que en esto el heteropatriarcado vuelve a hacer de las suyas. De hecho, el heteropatriarcado nos dice quién nos tiene que gustar, con quién nos tenemos que enrollar… Si tuviesemos que responder a la canción de Esne Beltza y La Mala «Quién manda aquí», podriamos decir que Aquí manda el heteropatriarcado. Como dice Amaia Zufia, de Bilgune Feminista: «Igual que aprendemos matemáticas, aprendemos a amar y a relacionarnos, de un modo muy insconciente».

182qqu

Si quieres seguir leyendo sobre cómo construimos nuestros deseos… pásate a la versión en euskera. Haz click aquí.

Guardar

Guardar

Guardar