EN ROMA

Me enamoré en el viaje de fin de estudios. En Roma. Claro, un colega me dijo que eso era normal, porque Roma al revés es «amor». Y si no te enamoras en una ciudad que se llama «amor», pues que no te vas a enamorar en la vida. Pero Roma es «amor» al revés y entonces yo me enamoré al revés también. Roma fue muy romántica, segun parecía yo estaba muy a gusto con ella y ella también conmingo, y el resto me decia, Ander, estás enamorado. Y yo que no sabia qué era eso.

Todavía no sé si estoy enamorado o no. Un colega me dice que si fuese así, estaría super enfadado porque Marta se lió con uno en fiestas de Bilbao. Y yo por más que me miro para mi adentros… no encuentro el enfado. Mi hermana me dice que no es enfado, pero que seguramente esté dolido. Y lo cierto es que yo, dolor, dolor… no siento mucho. ¿Igual soy un monstruo? ¿Igual no estoy preparado para el amor y como soy muy joven todavía no sé que es estar celoso? Si hubiese sabido que esto del amor es un sentimiento tan programado, igual me hubiese ido más tarde a ese viaje de Roma.

celos

Marta y yo lo pasamos bien juntas, eso sí. Entre nosotras hay mogollón de confianza, nos echamos unas buenas risas cuando estamos juntas, en las relaciones sexuales casi siempre nos lo pasamos bien, aunque no siempre estamos con ganas… Bueno, a veces nos cuesta un poco entendernos, pero ahí vamos, porque eso también requiere tiempo, conversaciones largas y quebraderos de cabeza, pero igual eso de estar juntas es así, ¿no?

https://www.youtube.com/watch?v=ZVOTPDDdGPQ&feature=youtu.be

Claro, hemos tenido conversaciones largas sobre todo esto. Sobre el ligue que tuvo Marta ese día en fiestas de Bilbo y sobre otros. Y a decir verdad, estamos bastante tranquilas de momento. No tenemos ganas de controlar la vida de la otra persona, y por eso, de momento, vamos a fiestas de Bilbo cuando queremos, solas, con colegas o juntas. Y por eso, según quién nos pregunte, habrá gente que dirá que lo nuestro no es amor. Pues no, nuestro amor es enrevesado, al revés. Es la ventaja de enamorarse en Roma.

Guardar

Guardar